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SANDY BAQUEDANO, ESTUDIANTE DE LA UNAH, ES UNA TRIUNFADORA EN EL TAEKWONDO

SANDY BAQUEDANO, ESTUDIANTE DE LA UNAH, ES UNA TRIUNFADORA EN EL TAEKWONDO

Con más de 15 años de experiencia en la práctica de una de las artes marciales más tradicionales en el mundo, el Taekwondo, Sandy Baquedano, estudiante del segundo año de la Carrera de Educación Física de la UNAH, alcanzó la medalla de oro en la categoría 53 kilogramos en los pasados Juegos Deportivos Universitarios Centroamericanos (JUDUCA 2016), poniendo el nombre de Honduras en alto.

Esta dedicada atleta de la Máxima Casa de Estudios nos comentó que desde los cinco años de edad su hermano mayor (Wilmer Baquedano Vásquez) ha sido su gran inspiración para practicar este deporte de combate, a tal grado de convertirse en su entrenador personal.

Desde muy pequeña se integró a la Escuela de Los Jaguares, equipo que entrena en las instalaciones de la Villa Olímpica, pero que hasta los nueve años se dedicó de lleno a entrenar en esta disciplina.

Baquedano, quien realizó sus estudios de secundaria en uno de los colegios más popular de Tegucigalpa, el Central Vicente Cáceres, explicó que se sometió al examen de la Prueba de Aptitud Académica (PAA) de la UNAH al salir del colegio, con la mirada en la carrera de Lenguas Extranjeras, pero que por problemas familiares pasaron dos años que no pudo matricularse en la Universidad.

Continuó relatando que al pasar esa fecha los resultados de la PAA tienen un tiempo de vencimiento, en el 2014 volvió a someterse a esta prueba matriculándose en la carrera de Educación Física, en el tercer período académico de ese año.

“Siempre me ha gustado la educación física, todos los deportes son bonitos, cada persona elige lo que le gusta, pero con el que más me identifico es el taekwondo. En el año 2007 fue mi primer combate y competencia en forma, gané el primer lugar a nivel Nacional estando en el equipo de Jaguares”, recordó la atleta de la UNAH.

Esta abnegada deportista universitaria nos comentó que ha participado en más de 20 competencias a nivel nacional, ganando tanto los terceros, segundos y primeros lugares en la categoría de 49 kilogramos.

JUDUCA 2016

Respecto a su participación en los JUDUCA 2016, nos comentó que a ella le tocaba competir el primer día de los juegos, que fue un lunes, y que por razones que desconocía no mencionaron su nombre, resaltó que estaba bien nerviosa, ansiosa por pelear, pero que siempre recibió el apoyo de los psicólogos de la UNAH.

“Llegó el martes y fui una de las primeras atletas en competir. Gané mi primer combate con Costa Rica, me fue muy bien; en el segundo round la eliminé, le llevaba 19 a 3 y ella ya no me podía alcanzar. Mi segunda pelea fue bien difícil porque mi contrincante era un poco más alta que yo, recuerdo que mi entrenador solo me dijo –si ganamos esta batalla nos fuimos- gané esa pelea 10 a 4.

Continuó relatando: “Mi última pelea fue contra una estudiante de El Salvador, contábamos con el mismo nivel de combate, no hallábamos cómo entrarnos, en el primer round quedamos 0 a 0 las dos, luego metimos puntos las dos, al final gané la batalla alcanzando la medalla de oro en 53 kilogramos”.

Con este triunfo, Sandy lo que más recuerda son todas esas emociones grandes que vive un deportista, que a pesar de no escuchar gritar su nombre se sintió más motivada al escuchar a fuerte voz el nombre de Honduras.

“Yo dije desde un inicio: ¡esa medalla de oro será mía! Mis entrenadores me decían 'yo confío en ti', y me agarraban las manos y me decían 'yo confío en ti'. A mi hermano, que es mi entrenador personal, le agradezco mucho porque sin su apoyo no estaría aquí”, resaltó la joven atleta de la UNAH.

Sobre la familia

Al consultar que cuál ha sido el apoyo de su familia, mencionó que sus padres más que todo le han brindado el acompañamiento en la parte académica, pero que en el deporte siempre ha sido su hermano mayor.

Una de sus anécdotas en el taekwondo sucedió cuando estaba pequeña, al perder la primera vez, cuando al cierre de la competencia se dirigió sola a la gradería de uno de los gimnasios de la Villa Olímpica, donde desconsoladamente se puso a llorar por su derrota, pero que en ese momento su hermano inseparable se le acercó y le preguntó por qué lloraba, "él me dijo 'no todo en la vida es ganar, pero uno siempre debe dar el todo por el todo'.

Metas

“Mi meta es graduarme, servir a Dios, luchar por lo que quiero, destacarme en mi deporte, ser reconocida por mis talentos, pero por los momentos me estoy preparando para la eliminatoria de los juegos nacionales, que serán en el mes de octubre, quiero obtener los mejores resultados y así viajar fuera del país”, finalizó Sandy Baquedano.